En su juventud esta mujer era una tenista bastante buena, pero aunque ahora es un ama de casa madura, sigue practicando el deporte por diversión. Cada semana va a la pista tres veces, y después tiene una sesión de sauna, pero nada de eso parece cansar a nuestra sexy deportista. Pero lo que sí la pone a tono después de cada partido es echarse un polvo con su marido que la espera impaciente en casa. El tipo está encantado con lo maciza que esta su esposa caliente, y para relajar todos sus músculos, le mete buena caña en el chocho y sobre todo en el culo, al que jode sin compasión.