Esta secretaria de dirección supo por su novio de Recursos Humanos que iban a realizar una reducción de plantilla, y no estaba dispuesta a irse al paro. Así que fue a preguntar a su jefe, que le confirmó los rumores, y ella tomó una decisión en situ. Sabía que a su jefe le iba darle por el culo a las tías, de hecho lo había hecho con varias en la empresa. A ella nunca se le había insinuado, pero no le iba a hacer falta, porque pensaba ponérselo a huevo. ¿Quería tener sexo anal a diario y a demanda? Pues no tenía más que mantenerla en el puesto. La sexy divorciada lo sentía por su novio, al que iba a convertir en un cornudo. Pero todo fuera por mantener el trabajo, y por probar la polla prodigiosa del director general.