Este chico y su tía trabajan en la misma fábrica y tienen el mismo turno, así que tanto a la ida como a la vuelta siempre van juntos en el autobús. Eso ha hecho que cojan mucha confianza hasta el punto de que son prácticamente una pareja. El jovencito es un vicioso morboso al que le gusta provocar situaciones sexuales comprometidas con su tía y hoy aprovechó que se había quedado dormida para manosearle las tetas y el coño. Cuando la mujer se despertó y se percató de lo que estaba pasando no se enfadó ni puso mala cara, sencillamente le siguió el juego.